jueves, 24 de diciembre de 2009

SOÑANDO A LAURA


En mis sueños he poblado
de amor perenne tu vientre,
prolongango nuestra sangre
sangre nueva para siempre.


Pajarito de los bosques
en tu nido, evocaré los olores
y en mi pecho en guerra perpetua
alojaré tus dolores.


Mi hermana de alta mirada
de ojos verdes, mirada tierna
mi mujer de amor y carne
de vida y pena eterna.


Tus pechos guardan tibios;
eres mi luz, mi vino, mi herida,
de mi jardín, hermoso lirio,
de mi corazón, pierna hundida.


Cristal delicado, florecita silvestre
temo tu cuerpo, que te traiciona,
temo a ese Dios que me niega tenerte
a mi costado, que te ambiciona.


Eres espejo de mi carne,
mi alma sustentas,
tus venas son mías,
mi aire alimentas.


No, no saco aún el pañuelo,
todavía es temprano,
aún sufriremos mi amor
tomados de la mano.


Si el amor imposible,
es el verdadero
no terminaré de decirte:
"¡Te quiero, te quiero!"


No hay comentarios:

Publicar un comentario