que no se pueden vivir más vidas
a ti que te has instalado
en una soledad comprensiva.
Ahora que tus palabras
Queman de tan frías
Y estas noches vacías
Se acumulan en la nada.
Ahora que tus latidosSe aletargan un instante
Y el horizonte distante
Adormece tus sentidos.
Y cuando la nube vierta la lluvia que te bañe
Y entonces tu cuerpo entero inhabilita,
De súbito, en ráfagas de palabra escrita
transcribes las líneas que de tu alma emanen.
Es tu silencio el alimento
de mis sueños imposibles
y de las voces inaudibles
de lo que por ti siento.
A nado en tus misterios
Me encojo y entimismado aguardo en vela
Habitando esta trama inevitable
Aguardando un borroso desenlace
Cuando aquella nube negra se disipe.
Mientras tanto yo sigo flotando
En un bote agitado sin sentido
En los bordes de tu soledad
Quizá sin más abrigo
Que mi más noble egoísmo.
